martes, 18 de octubre de 2011

Represión y oportunidad


Hay que aprender a leer las noticias y entender que subyace bajo lo aparente. Dos noticias aparentemente separadas, en dos contextos y eventos diferentes que tienen mas vínculos que solo los que vemos.
La represión injustificada contra los hinchas del Colo-colo el domingo 16 de Octubre y la quema de un bus del transantiago y el anuncio del ministro del interior y SEGURIDAD Rodrigo Hinzpeter de aplicar la ley de seguridad interior del estado.

El Domingo 16 se realizo el partido que enfrento a C.D. Universidad Católica y C.S. y D Colo-Colo, en el estadio  San Carlos de Apoquindo , para este encuentro U. Católica decidió limitar la venta de entrada a publico general, la Intendencia metropolitana dispuso un cordón policial y limitar el acceso a las calles cercanas al estadio,  el procedimiento aplicado por Carabineros y ordenado por la intendenta doña Cecilia Pérez solo se puede definir de exclusión hacia una parte de la ciudadanía y de tintes totalitarios. El motivo de la exclusión, el simple hecho de llevar alguna prenda o emblema del Club Colo-colo. (ver)
La comuna de las Condes vivió la tarde del domingo un verdadero estado de sitio, donde los hinchas del club Albo eran bajados de buses, otros que llegaban a pie requeridos por carabineros, para terminar en uno y otro caso detenidos por el lapso de la duración del partido.  Usted puede encontrar mas información al respecto en distintos medios nacionales, pero lo que nosotros ponemos en relevancia es que la situación recuerda a Sudáfrica durante el apartheid, a la Irlanda de los 70s o al Israel actual.
El lunes 17 de Octubre, a solo un día de los hechos de las Condes, se preveía un día difícil, se sabia que había un llamado a una nueva jornada de movilizaciones y nuevamente aparecieron los encapuchados en las marchas, solo que además esta vez en la esquina de Macul con Grecia, unos cuantos encapuchados detuvieron a un bus del Transantiago, bajo amenazas hicieron bajar a los pasajeros y incendiaron el vehículo.
Si bien el acto realizado por los encapuchados , mas allá de la quema de bus, es una violación a los derechos de las personas que se movilizaban en este, es de imaginar el terror vivido por trabajadores, por las mujeres y quizás por menores y adultos mayores que fueron victimas de estos sujetos.
Pero nos caben dos grandes dudas.
¿Acaso los encapuchados trabajan para el ministerio del interior? Porque la quema del bus es lo mejor que le hubiera pasado a Hinzpeter y su ideología de acotar las libertades de todos. A los minutos de este acto lamentable, aparece Hinzpeter anunciando la aplicación de la Ley de Seguridad del Estado.
Y recordemos que en el congreso esta a tramite la llamada LEY ANTI-TOMAS o LEY ANTI-SAQUEOS, y este suceso le viene bien al gobierno para impulsar esta ley antidemocrática, digna del gobierno de la novela 1984 de Orwell.
¿Por qué no se aplico los niveles de seguridad que se habían aplicado el día anterior, en Las Condes?  El día anterior se trato como a delincuentes violentos a los hinchas solo por llevar camiseta de Colo-Colo, deteniéndolos y vejándolos en sus derechos; menos de 24 horas después los mismos carabineros no hacen nada contra los encapuchados.
Se había dicho que se detendría a los encapuchados, pero nunca es así, se sabe que sujetos encapuchados solo asisten a las marchas a sabotear las movilizaciones, a hacerle un flaco favor a los estudiantes y al resto de nosotros, pero allí van y hacen de las suyas y carabineros solo actúa cuando la situación sale de los posibles controles o quizás ese sea el control deseado. (ver)
Es como si intencionalmente se hubiera dejado quemar el bus, como si se esperara un desmadre violentista para luego ser usado para justificar la generación de mas represión, en un sistema que por ya es represivo.
Dudo que sepamos alguna vez quienes quemaron el bus, pues estaban encapuchados, pero el acto sirvió al gobierno.

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